Sus
45 kilómetros nacen en las lomas de Tapaste y desembocan en La Chorrera, bello
epílogo del Malecón habanero.
La iniciativa de
Belkis Fonseca Medina moviliza a sus vecinos en pos de un impostergable
propósito, recuperar las riberas del Almendares, río al que mucho le debe La
Habana, arteria vital para casi la cuarta parte de su población actual,
evaluada en más de dos millones de habitantes.
Considerado por
los especialistas un río en plena
madurez, los tal vez diez millones de años de su curso ahora sinuoso,
marcado por numerosos meandros, determinan accidentes geográficos que marcan
todo un camino de la capital cubana. “Lo
triste son los vertederos de basura, no descanso en promover la limpieza, al
menos de nuestro vecindario del barrio Zamora, aquí en Marianao”, dice con emoción Belkis.
El proyecto
significa crear conciencia ambiental. Se trabaja de casa en casa, movilizando
los pobladores para eliminar micro vertederos de basura, sobre todo en las
riveras del río. De paso, Belkis realizó un vídeo educativo donde se retratan
los propios vecinos, sus acciones y el
cómo hacer mejor las cosas, tratándose del medio ambiente.
Las acciones
diarias necesitan de motivaciones en una sociedad marcada por las
frustraciones, por ello se promovió un taller comunitario donde discutir qué
hacer a favor del río, alma silenciosa de su comunidad. Finalmente llegaron a
un concurso de amplia participación popular, mostrando de formas diversas el
sentimiento de amor hacia la naturaleza.
El Almendares es
víctima de muchos ataques, algunos escapan a las posibilidades de acciones
comunitarias, precisan inversiones mayores, tal es el caso de los vertederos de
aguas negras, cuya eliminación total depende del estado, mientras tanto, cada
acción individual o de un grupo, eliminando otros contaminantes, es un paso a
favor de recuperar las aguas que un día eran cristalinas.
“La ciudad se olvida de su río, el que
inspiró parques ecológicos, recreativos, tan bellos como Río Cristal y el
Bosque de La Habana”, recuerda Belkis Fonseca Medina al hablarnos de su
proyecto Madre Natura.
Por último, la
sonrisa viene al rostro de esta abnegada mujer, cuando anuncia que la
organización no gubernamental People in
need les ha otorgado apoyo con el
fin de continuar su firme propósito de sumar a toda una comunidad de Marianao
en defensa de la naturaleza, es decir, de ellos mismos.
Por Mario Hechavarria Driggs.
