Viene el Papa, El
Arzobispo de La Habana acaba de compartir una amigable entrevista en la TV
nacional con Amaury Pérez Vidal. Acostumbrado a la fraseología, “Su Eminencia”
rodeó cualquier compromiso directo con la realidad, especialmente “presos políticos”,
“represión”, “acoso” y el fantasma de
unas mujeres vestidas de blanco.
Curiosa expresión,
Ortega Alamino dijo: "la
Iglesia no está en el mundo para cambiar gobiernos, si llevamos nuestro
mensaje, entonces los hombres cambiarán ellos mismos los gobiernos.” Símil del
tan execrado marxismo, Marx dijo:”Cuando
las ideas prenden en el cerebro de los hombres se convierten en una fuerza
material.”
¿Idealismo o materialismo?, Al ilustre prelado le recriminan el silencio
cómplice ante más de 700 arrestos políticos al cerrar agosto, de acuerdo al
reporte mensual de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación
Nacional (CCDHRC), que de paso ubicó al gobierno cubano como “recordista en
detenciones policiales de corta duración durante el presente año en el
hemisferio occidental.”
El pasado tres de julio, en la aún por inaugurar Embajada de los Estados
Unidos en Cuba, Antonio Rodiles, líder de Estado de Sats, entregó al Arzobispo
de La Habana una lista de 74 presos políticos, solicitando hacer llegar al
Obispo de Roma el reclamo de la oposición.
Ahora en la televisión nacional, la respuesta del purpurado obvió el
asunto al directo: “Hemos recibido muchas
cartas pidiendo mediación ante el gobierno para la liberación de personas
encarceladas por delitos económicos y comunes. Estas personas esperan un indulto, una amnistía con la visita del Papa, pero no sabe si la habrá o no, esto es algo que
depende del Estado cubano.”
Era el
martes 1ro de septiembre en la noche, esa mañana comenzó en Cuba el curso
escolar 2015-2016. El sistema educacional mantiene su pertinaz ateísmo
marxista-leninista, no hay asomo de una autorización a la alternativa de
escuelas católicas en el país, tales como aquel prestigioso Colegio de Belén
donde formó su carácter Fidel Castro Ruz.
Tal vez el
largo ministerio contemporizador de Jaime Lucas Ortega Alamino encontró
tranquilidad para su clero acompañante, financiado desde Roma. Tres Papas en
menos de 20 años, múltiples exhortaciones romanas acompañadas de similar
cantidad de silenciosas rechiflas castristas.
La mañana
del cónclave decisivo en Roma, el todavía Cardenal Bergoglio escribió una nota a
su colega cubano, sobre sus intenciones si finalmente era elegido: terminar con
la “Iglesia autorreferencial”, el
reto se traduce en acciones concretas no vistas hasta hoy, impensables en el Cardenal
cubano, nacido hace 79 años en Jagüey Grande.
La Nación
de Buenos Aires, periódico con casi dos siglos de historia, publicó esta
expresión del único Apóstol cubano, José Martí: “Libertad es
el derecho que todo hombre tiene a ser honrado, a pensar y hablar sin
hipocresía.”
Resulta significativo que
pasado un siglo, la misma publicación nos permita leer esta reflexión del papa
Francisco cuando le preguntaron por el papel de la Iglesia Católica hoy:
“Me gusta usar la
imagen de hospital de campaña: hay gente muy herida que está esperando que
vayamos a curarle las heridas, heridas por mil motivos. Y hay que salir a curar
heridas.”
Por Mario Hechavarria Driggs
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