Las grandes
estrellas de los dibujos animados norteamericanos aparecieron en venta, este
fin de semana, en la Plaza Carlos III, uno de los mayores complejos de tiendas
recaudadoras de divisas del país.
Retratarse
junto a Superman, Mickey Mouse, Minnie o el Pato Donald, junto a los arbolitos
de Navidad, equivalía a 2 pesos convertibles ó 50 pesos cubanos, ahora que en tales comercios se implantó la
opción de pagar con cualquiera de las dos monedas circulantes en el país.
La súbita
invasión de los íconos del Cartoon estadounidense llegó hasta la televisión, donde el programa sabatino “23 y
M”, conducido por la carismática Edith Mazola, presentó a niños disfrazados de
Spiderman, Bob la Esponja y las Tortugas Ninjas, Ben diez, entre otros
personajes famosos.
Coincidencia
o no, el pasado 31de octubre la capital cubana fue testigo de numerosas
celebraciones del Halloween al más puro estilo norteamericano, inclusive fueron
vistos grupos de niños en las calles, ostentando los tradicionales disfraces de
ocasión.
El inglés
está de moda, proliferan las escuelas privadas, donde los maestros incluyen
actividades capaces de compenetrar a sus alumnos con la cultura anglosajona.
Los pioneros cubanos prefieren los muñequitos japoneses o americanos ante los
aburridos animados nacionales.
La pregunta
es ¿dónde está Elpidio Valdés?, el mambí
patriota, clásico personaje de los muñequitos del cine y la TV cubana, parte de
un sistema de medios de difusión estatal ideológico que rechaza la publicidad mercantil.
Los niños
cubanos han dejado si trabajo al héroe impuesto para darle rienda suelta a sus
propios sentimientos.
Por Mario Hechavarria Driggs, periodista Independiente.
Mario, me río y a la vez entristce pensar y saber que en los últimos 55 años de tiranía los ciudadanos cubanos se han cohibido de las cosas mas esenciales que el mundo entero siempre a gozado. Todo un sacrificio inútil que el tirano cubano y sus secuaces le ha implantado a los cciudadanos que residen en la isla, para ellos enriquecer mas.
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